La medida «excepcional» permitirá desarrollar los trabajos en un bloque que arrastra ocupaciones ilegales y vandalismo
Las 96 viviendas sociales
de la avenida Reyes Católicos de Alfafar tendrán seguridad privada esta misma
semana. La Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración acaba de
contratar este servicio para que puedan comenzar las obras de reparación y rehabilitación
de este bloque de pisos que arrastra numerosos problemas por vandalismo y
ocupaciones ilegales.
Se trata de una medida «excepcional» para «realizar sin problemas
las intervenciones programadas», según recalcaron ayer desde Vivienda. No es
frecuente que se recurra a vigilancia extra pero la situación de los bloques es
compleja. El vandalismo en viviendas y elementos comunes, problemas de
seguridad y convivencia vecinales, la elevada morosidad y los enganches
ilegales son algunos de los problemas que arrastra el grupo Reyes Católicos. De
hecho, también se ha reforzado la vigilancia de la Policía Local en el barrio.
En los últimos meses se han intensificado también las inspecciones
de las viviendas y la identificación de los ocupantes y se han llevado a cabo
reparaciones de urgencia en las viviendas públicas por valor de más de 8.000
euros. «También se han invertido más de 11.000 euros en la reparación de
elementos comunes, centrados principalmente en la reparación de ascensores,
puertas de acceso y telefonillos».
La Conselleria ha presentado a los vecinos el Plan Urgente de Intervención
Social que va a desarrollar en el grupo de viviendas, en una reunión a la que
asistió la directora general de la Entidad de Infraestructuras de la
Generalitat (Eige), Blanca Marín; el alcalde de Alfafar, Juan Ramón Adsuara, y
representantes de todos los grupos políticos municipales.
En ella se explicaron las medidas del plan de actuación
considerado «urgente» por la Generalitat, propietario mayoritario del bloque de
pisos. «Uno de los graves problemas que afecta a este grupo son las ocupaciones
ilegales».
Los representantes de la Conselleria explicaron que la nueva
política del Consell «va a tener tolerancia cero con estas actuaciones ilícitas
por varios motivos: impiden a familias sin recursos que respetan la legalidad a
acceder a una vivienda, al mismo tiempo que paralizan el desarrollo del
programa de normalización de viviendas en el que trabaja la Generalitat».
El vandalismo en viviendas y en elementos comunes, «los problemas
de inseguridad y convivencia vecinales, las dificultades para el mantenimiento
de las comunidades, la elevada morosidad y los enganches ilegales son otros de
los problemas que afectan al grupo Reyes Católicos».
También se está tramitando la contratación de un proyecto de
rehabilitación de elementos comunes del conjunto de fincas. Además, dentro de
este plan urgente, también se informó a los vecinos que desde la Conselleria se
va a apoyar la gestión de las comunidades de vecinos «dadas las dificultades
que tienen. Para ello, recuperará el contrato de mantenimiento de los
ascensores para faciligar su funcionamiento» y se contratará un administrador
de fincas hasta lograr la «normalización del grupo»».
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