El Concejal de Salud, Seguridad y Emergencias de Madrid, Javier Berbero, informó este martes de que el Ayuntamiento tiene previsto acabar con la seguridad privada en edificios oficiales, como Juntas de Distrito o Áreas de Gobierno, según vayan rescindiendo los contratos con las empresas que explotan este servicio. Sólo la sede del Consistorio, en la plaza de Cibeles, mantendrá vigilancia privada.
Los vigilantes de seguridad privada serán sustituidos por agentes de la Policía Municipal, que serán apoyados por sistemas de videovigilancia. De esta manera, el Ayuntamiento de Madrid prevé un ahorro de tres millones de euros por año, es decir, doce millones de euros por legislatura, según precisó Barbero.
Tan sólo conservará seguridad privada la sede del Ayuntamiento de Madrid, que actualmente se emplaza en el Palacio de Cibeles. Agentes de Prosegur, la empresa que tiene la concesión del servicio de vigilancia, se encarga de la seguridad de accesos tanto en la sede del Ayuntamiento, en la calle Montalbán, como en el Centro de Cibeles.
El Ayuntamiento no concretó a cuántos trabajadores afectará esta medida, pero aseguró que se hará de manera paulatina en los años que quedan de legislatura.
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